El Instituto Secular de los Siervos del Sufrimiento fue fundado por el sacerdote diocesano P. Pierino Galeone que, siguiendo el modelo y la inspiración de San Pío de Pietrelcina, quiso asumir para sí y para sus hijos el servicio del sufrimiento como testimonio de caridad hacia sus hermanos.
Para todos los miembros, el sufrimiento personal, asociado a los sufrimientos de Cristo, se convierte en un instrumento de alivio y redención de los demás.
La Familia dio sus primeros pasos con la consagración de la entonces joven de 17 años Giorgina Tocci, Madre Fundadora del Instituto, el 16 de julio de 1957. El Instituto está formado por hombres y mujeres, clérigos y laicos, unidos espiritualmente en el mismo carisma.
El 25 de diciembre de 1993, Monseñor Benigno Papa, Arzobispo de Taranto, reconociendo a las Siervas del Sufrimiento como carismáticamente originales y pastoralmente útiles, habiendo obtenido el nulla osta de la Santa Sede, las erigió en Instituto Secular de derecho diocesano.